Como todos sabemos, la educación financiera en la mayoría de nuestros colegios e institutos, brilla por su ausencia, cuestión bastante difícil de entender, cuando el dinero es el medio de cambio para obtener todo lo material que tenemos o que deseamos.
Es importante que nuestros adolescentes y pre-adolescentes, adquieran esa cultura financiera que no tengan las carencias que la población adulta tiene, y ya que la administración no les ofrece esa oportunidad de: aprender y descubrir los diferentes usos del dinero, como generarlo y como multiplicarlo, debe ser la familia, quien les enseñe y les despierte las ganas por tener una sana relación con le dinero que contribuya en un futuro a tener, como siempre digo, una vida financiera tranquila.
Uno de los hábitos que recomiendo es, darles una paga semanal o mensual, como sea mejor para la familia en cuestión.
Con la paga, en primer lugar, aprenden a conocer las diferentes monedas y billetes de nuestro sistema monetario, y en segundo lugar, comienzan a ser conscientes de lo que cuestan las cosas, relativizan lo que quieren comprar versus lo que pueden comprar, cuestión muy importante, ya que aquí nace la incertidumbre entre necesidad ó deseo.
Es decir, cuando los padres, los abuelos. los tíos, etc, les costeamos l todo lo que quieren, según ellos es por una cuestión de “necesidad”, pero, cuando son ellos mismos los que tienen que sufragarse sus gastos con su paga, entonces poco a poco van discriminando si realmente lo necesitan o si sólo lo desean.
Este cambio en su percepción, es muy interesante, pues se enfrentan a esta dicotomia desde pequeños, y sin darse cuenta, están aprendiendo a no vivir por encima de sus necesidades.
Sabemos que siempre hay excepciones, quien no tiene un hijo que todo lo ahorra, y otro que todo lo contrario, pero no importa, seguir adelante, la enseñanza va quedando, y en un futuro tendrán más posibilidades de ser adultos responsables y cuidadosos con los usos que le dan al dinero.
Por último, todo esto debe ir acompañado con el ejemplo de sus referentes, entre ellos nosotros como padres, por tanto, vamos a enseñarles la teoría y a ponerlo en práctica todos juntos.
Si tienes dudas o no sabes por dónde empezar para mejorar tus finanzas, tienes multitud de medios para formarte, cursos, podcast, videos, pero si quieres algo más personalizado…